Hace años, digamos en los ochenta, el Calamón era un mito para mí, casi como para cualquier ornitólogo...
Un ave grande, colorida y exuberante y que solo podía verse en el P.N.Doñana...
Desconocía si se podía avistar con facilidad, si era escurridiza, si era solitaria y como era realmente su aspecto, su color, su brillo, sus reflejos y en definitiva su vistosidad...
Con los años y sabiendo que el Calamón había ido recuperando su territorio, algunos amigos me enseñaron sus fotos en las lagunas de Rivas (Madrid)... y una memorable tarde, con un amigo ornitólogo, por fin pude ver mi primer Calamón.
Esta fue una de esas emociones que cuando suceden por primera vez... descubrir un ave tan espectacular, es como la revelación de una película o un libro luego predilectos...
Los siguientes calamones los vi en el embalse de Arrocampo (Cc), en la laguna de El Hondo (A), en la de Navaseca (CR), en las marismas de Barbate (Ca)..., llegando a pensar que ahora, al contrario, no había laguna sin calamones...
Con los años, sigue siendo emocionante avistar un Calamón, destellando en los prismáticos al detectarlo, entrando y saliendo entre los carrizos.
Hacia la década de los sesenta, la destrucción de muchos humedales y la presión de la caza condujeron a una situación muy delicada al calamón común, el más grande y espectacular de los rálidos europeos, que por aquel entonces, quedó confinado a las marismas del Guadalquivir. Actualmente —y gracias en parte a la protección dispensada a nuestros humedales, a la eliminación de la presión cinegética y a exitosos programas de reintroducción, así como a una sorprendente capacidad de colonización, el llamativo calamón ha consolidado de manera segura sus poblaciones.
El calamón común es una especie propia de las espesuras ribereñas que rodean lagunas, marjales, marismas o embalses, de las que rara vez se aleja. Prefiere, en general, las tierras bajas de las regiones de clima mediterráneo, donde se instala en humedales de aguas tranquilas o estancadas —tanto dulces como salobres—, con extensas áreas de vegetación palustre (carrizos, eneas) rodeando las láminas de aguas abiertas.
Desconocía si se podía avistar con facilidad, si era escurridiza, si era solitaria y como era realmente su aspecto, su color, su brillo, sus reflejos y en definitiva su vistosidad...
Calamón en la laguna de Navaseca (Ciudad Real). Oct-2014.
Subido a sus larguísimos zancos rojos, el calamón maneja habilmente los tallos, yemas y
brotes de eneas, lirios y catañuelas de los que se nutre.
Esta fue una de esas emociones que cuando suceden por primera vez... descubrir un ave tan espectacular, es como la revelación de una película o un libro luego predilectos...
Calamón en la laguna de El Rincón, Rivas (Madrid). Abr-2010.
Ejemplar solitario, primaveral, que se dejó observar unos pocos e imborrables minutos.
Ejemplar solitario, primaveral, que se dejó observar unos pocos e imborrables minutos.
Grupo de calamones en P.N. Las Tablas de Daimiel, (Ciudad Real). Ene-2013.
Hasta doce calamones juntos pude contar en invierno, indicando su carácter gregario.
Pollo de Calamón en la laguna de El Hondo (Alicante). Jul-2014.
Los precoces pollos de los calamones, son algo así como el ejemplo grotesco del "patito feo", con esos dedos desmesurados y el pico superlativo y oscuro, correteando por el fango y entre el laberinto de cañas...
Los precoces pollos de los calamones, son algo así como el ejemplo grotesco del "patito feo", con esos dedos desmesurados y el pico superlativo y oscuro, correteando por el fango y entre el laberinto de cañas...
Hacia la década de los sesenta, la destrucción de muchos humedales y la presión de la caza condujeron a una situación muy delicada al calamón común, el más grande y espectacular de los rálidos europeos, que por aquel entonces, quedó confinado a las marismas del Guadalquivir. Actualmente —y gracias en parte a la protección dispensada a nuestros humedales, a la eliminación de la presión cinegética y a exitosos programas de reintroducción, así como a una sorprendente capacidad de colonización, el llamativo calamón ha consolidado de manera segura sus poblaciones.
El calamón común es una especie propia de las espesuras ribereñas que rodean lagunas, marjales, marismas o embalses, de las que rara vez se aleja. Prefiere, en general, las tierras bajas de las regiones de clima mediterráneo, donde se instala en humedales de aguas tranquilas o estancadas —tanto dulces como salobres—, con extensas áreas de vegetación palustre (carrizos, eneas) rodeando las láminas de aguas abiertas.
Su área de distribución es bastante extensa, pues comprende buena parte de los humedales tropicales y subtropicales del este y sur de África, Madagascar, sur de Asia, sureste de Australia, Nueva Zelanda y algunos enclaves en torno al Mediterráneo. Se han descrito hasta 13 subespecies, de las cuales porphyrio es la que aparece en nuestro territorio.
España concentra la práctica totalidad de los efectivos en territorio europeo (en torno al 90%).
No hay comentarios:
Publicar un comentario