Una de las rutas más atractivas de la Comunidad de Madrid
Si hablamos de la Dehesa de Navalquejigo, podemos "anunciar" una ruta amable, en un paisaje amable de arroyos y bosques variados, roquedos en mosaico, escasos desniveles y buena sombra. Más amable si vamos en compañía de gente amable o de nuestra gente amada.
Podemos "describir" nueve Kilómetros de ruta circular de dificultad baja, por un sendero bien señalizado que combina la belleza de su paisaje con una distancia a la ciudad de Madrid que facilita su descubrimiento.
Igualmente podemos "enunciar" sus valores históricos o naturales; Su historia que se remonta al menos hasta el siglo XVI… téngase en cuenta que por ella discurre la Cañada Real Leonesa...
y la ciencia, que por su parte dice que sus más de 450 ha se ubican en una zona llana, denominada “nava”, consistente en un monte de dehesa, mayoritariamente con encinas y pinares de pino piñonero, pero también con una rica variedad de bosquetes de alcornoques, arces, fresnos y quejigos, de los que toma su nombre.
Finalmente podemos "reseñar" que se trata de uno de los mejores
encinares de nuestro entorno, por su estado de conservación, por la variedad de
sus ecosistemas y por la riqueza de sus comunidades faunísticas,
particularmente la de aves.
En suma, un paseo muy agradable entre encinas, a la orilla de algún arroyo en el que hay que prestar mucha atención porque podemos tener la suerte de ver algunas aves singulares, desde los omnipresentes rabilargos, hasta nuestras mayores águilas, lagartos ocelados, ciervos y jabalíes… que por algo le dan el reconocimiento de formar parte indiscutible de la riquísima Zona de Especial Protección de Aves ZEPA 56.
El recorrido, partiendo de Fresnedillas de La Oliva,
comienza al inicio del camino que sube hasta “La Cabezuela”.
A partir de ahí pasaremos por el picadero y la fábrica de quesos de igual nombre y más adelante por la Yeguada Conchaymar.
Un poco más adelante y tras cruzar un arroyo, tenemos que abrir la puerta a la derecha del camino, que nos introduce de lleno en la dehesa.…
Después, solamente queda seguir los hitos de esta ruta balizada y prestar atención para ir descubriendo sus numerosos valores.
(Se debe mencionar que esta ruta está restringida entre los meses de marzo y septiembre, debido a la presencia de fauna sensible y protegida, pudiéndose en esta época limitar a pasear por la pista principal o a admirar las vistas de la Dehesa desde la ctra de Fresnedillas a Robledo de Chavela).
A partir de ahí pasaremos por el picadero y la fábrica de quesos de igual nombre y más adelante por la Yeguada Conchaymar.
Un poco más adelante y tras cruzar un arroyo, tenemos que abrir la puerta a la derecha del camino, que nos introduce de lleno en la dehesa.…
Después, solamente queda seguir los hitos de esta ruta balizada y prestar atención para ir descubriendo sus numerosos valores.
(Se debe mencionar que esta ruta está restringida entre los meses de marzo y septiembre, debido a la presencia de fauna sensible y protegida, pudiéndose en esta época limitar a pasear por la pista principal o a admirar las vistas de la Dehesa desde la ctra de Fresnedillas a Robledo de Chavela).